jueves, 24 de noviembre de 2011

El Circo de los Horrores




Suena un trueno, chirrían las puertas del cementerio, redoblan las campanas a muerto.
¿Es esto propio de un circo?
De "El Circo de los Horrores" si.
De la mano y el mordaz humor de Nosferatu, el Vampiro nos internamos en un festival de terrores y diversiones a partes iguales.
El mismo nos hace de "cicerone" en un desfile demencial de fantasmas, vampiros y vampiresas, payasos nada convencionales, zombies y un sinfín de seres de pesadilla dispuestos a hacernos pasar un rato genial.
¿Quieren saber qué más hay en este circo? mucho esfuerzo, cariño y profesionalidad, como nos enseña y comenta Suso Clown, director y "pater familias" de esta singular mezcolanza de artistas.

Suso, todo un profesional en el mundo del circo, habia bregado mucho para llegar hasta aquí, a este circo nada convencional, que se alejara de la estereotipada imagen de los circos con fieras y payasos ( que ojo, en este "Circo de los Horrores" tambien las hay, pero hay que buscarlas en nuestro subconsciente) exclusivamente para niños.
Suso queria darle la vuelta de tuerca definitiva al circo, hacerlo llegar a todo el publico posible y conseguir una nueva experiencia que asombrara a propios y extraños para hacernos salir con una sonrisa de asombro tanto en la cara como en el corazón.
En las propias palabras de su director veíamos el interes por ese nuevo circo intergeneracional, un circo en el que, de las abuelas a los nietos, todos se asombraran y divirtieran, que se sintieran participes de un trabajo y un espectáculo respetuoso con el publico y que devolviera ese respeto a los propios artistas.
Pero alguien podra pensar al oír o leer "circo, ensayos y números" que van a ver simples funambulistas, contorsionistas o malabaristas al uso.
Nada más alejado de la realidad.

El propio "Demonio" saca sus huestes del Infierno para que demuestren su poderío y su habilidad, en una sucesión de numeros que rememoran las películas o criaturas de la mitologia del miedo más clasicas y aclamadas.
Disfrutar de lo mejor en destreza, belleza y riesgo con el morbo de lo monstruoso.
Eso precisamente es uno de los grandes acicates del show.

En palabras del propio Suso:
"Queria hacer un nuevo tipo de circo que no se hubiera visto, mantener la idea en si del espectaculo pero quitarle todo lo rancio que tenia acumulado el concepto clasico de circo.
Los vampiros, los monstruos, llaman mucho la atención, a la gente le gusta pasar miedo y asustarse y asombrarse.
Mi idea era dar con la formula para conseguirlo y creo que esta saliendo bien".
Y, a juzgar por las impresionantes criticas ( y mi opinion personal), esta más que conseguido.

Pero todo eso no se consigue, como todo lo que merece la pena, más que con tesón, ideas muy claras y el apoyo de la gran familia que son "El Circo de los Horrores".
Y no solo metafóricamente, ya que, como si de una moderna "Familia Addams" se tratase, Nosferatu / Suso, la sensual Debora y la pequeña "Dulce Sara" conforman el núcleo de una compañía de casi medio centenar de profesionales de todas partes del globo, como muestra de la profesionalidad y el nivel exigido tanto por Suso como, sobretodo, por el publico.
Ellos curten sus elaborados numeros mediante ensayos continuos y exhaustivos, nuevos y mejorados numeros, y una sana competitividad interpersonal que mantiene al propio circo siempre en forma para defender su posición de exito.

Como se podran imaginar, "El Circo de los Horrores" no esta exento de anécdotas y personajes curiosos.
Sin intención de desvelar lo que Suso Clown / Nosferatu lleva forjando desde el año 2003 han pasado ( y pasaran)por este singular espectaculo todo tipo de criaturas, pero puede que la que más miedo provoque sea la pequeña Sara o "Dulce Sara" para los amigos, toda una profesional a sus 11 años que va camino de ser la revelación de este show.
Pero cuidado, no se dejen engatusar por su angelical aspecto, es un aviso, ya que en este circo, nada es lo que parece y todo es más de lo que se espera.

A nivel personal, es muy difícil y tentador no comenzar a hablar y a divagar sobre las genialidades que tanto a nivel humano como profesional se ven y disfrutan en “El Circo de los Horrores”, ya que ¿qué gracia tendría entonces descubrir a todos estos artistas de pesadilla por uno mismo?.

Lo que si fue genial, y reconozco que es algo que siempre he querido desde niño, es el poder ver,curiosear y saborear los entresijos de un circo (sobretodo de uno así) en sus momentos más o menos cotidianos.
Verlo y paladearlo todo con ojos curiosos, conocer a los profesionales tras los monstruos (unos monstruos que se vuelven más entrañables cuanto más se indaga en sus “alter-ego” humanos), pasear libremente bajo la carpa mientras alguien habla de juegos de luces, una vampira ensaya cual es la mejor forma de seducir a un incauto o los atletas comienzan a poner a tono sus habilidades.

Es una sensación como de intruso, el pasearse impune por los dominios de estos artistas de lo macabro (un arte que tiene mucho que ver con la “Commedia dell'Arte” italiana, como podrán comprobar los asistentes), las miradas de curiosidad reciprocas mientras no se pierde un ápice de concentración, tanto en lo que los hace los mejores, como en lo que es para mi un sueño cumplido.
Hay mucho de carnavalesco en un circo.
Suso Clown, el director, nos contaba las miles de preguntas que via Internet tantos y tantos fans les hacian con respecto a sus “sosias” circenses.
“Hay mucha gente que nos pregunta qué comemos, dónde dormimos... A nosotros nos choca”- Me confiesa riéndose con complicidad. - “Al fin y al cabo somos personas normales, pero los personajes del circo gustan y la gente se queda con eso y es lo que importa”.

La amabilidad y la cordialidad del circo se respira en cada rincón y el propio Suso parece ser el núcleo de todo ese “buen rollo”.

Nos despedimos de todos ellos, deseosos de verlos muy pronto en acción, tanto en “El Circo de los Horrores” como en los siguientes proyectos de “circo-terror” que tanto dominan.
Mientras dejamos atrás la carpa, las dependencias de los artistas, sus caravanas, camiones y remolques nos queda el regusto romántico de ver como hay gente que hace del llevar la ilusión y el ilustrar la fantasía su profesión con tal ahincó y vehemencia, algo que en este blog apoyo y respeto por todos los medios.

Armando Valdemar


* * * Para más información sobre el propio circo: http://www.circodeloshorrores.com/es/inicio

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